Caminos y Pisadas

Así es como a veces se ven los caminos, inseguros, llenos de obstáculos  y es que solo depende de ti cruzarlos, atravesaros y hacer algo mas con ellos, porque en tan solo un paso, una pisada, tu vida y tu entorno puede cambiar completamente, una vez me dijeron que la vida es para aprender, porque nadie te enseña como se deben hacer las cosas, pero no puedes estar aprendiendo para siempre, porque llega un momento en el que todo se detiene y te das cuenta de que has aprendido de todo, en ese segundo es cuando tu vida se detiene, se para y sabes que estas listo para algo mas... Algunos llaman eso partir y viajar lejos, otros lo conocen como muerte.

Creo que solo es un paso mas para saber quien eres, no existe una diferencia entre la vida y la muerte, es como dividir el cielo y el infierno, ambas cosas las vives aquí en la tierra, en cada vivencia que obtienes, en cada obstáculo que superas, cuando estas mal y no puedes mas, o simplemente cuando estas demasiado feliz y no paras de disfrutar, porque ambas cosas se consumen en un delicado equilibrio, y es que vivimos en una balanza, pasamos equilibrando un poco de ambos para poder mantenernos al margen, para poder tener un poco de todo, y no un exceso de nada, quizás existen mas cosas que te hagan cambiar de idea de un segundo a otro...

Pero en mi trayectoria, he aprendido que a veces las cosas que menos esperamos, son aquellas que nos llenan de sorpresas... Hace un tiempo atrás baje de golpe del cielo al infierno... Atravesé las llamas de fuego intenso, para dejar que mi cuerpo cayera y cayera, se quemara, se destruyera por completo, y deje que el viento impulsara un par de alas negras, rotas al suelo de un porrazo... Aprendí a vivir con ello, a soportar el dolor, y con el paso de los años, crecí  madure, retorne esa idea y el vuelo se va dando lentamente, es lo mismo que haces con una herida, la sanas de la misma manera que tu mente va creciendo, de la misma forma en la que tu mismo vas evolucionando, del mismo modo que los caminos se atraviesan ante ti y tienes que aprender a distinguir que es bueno que es malo...

Hace meses atrás perdí algo tan valioso, el dolor se hace intenso cuando pierdes algo de tan magnitud, se hace intenso cuando sientes que la herida ya no es herida, porque se ha transformado en una simétrica, intente curarla  con frialdad... Y hasta ahora, aun no consigue sanar, ¿por que lloramos cuando las personas nos dejan?, simple es un método de desahogarnos y lanzar hacia fuera nuestro dolor, pero cuando no lo haces, dejas que todo se consuma por dentro, que todo se enfoque y al fin, haces que la cicatriz se haga mas grande en lugar de cerrarla...

Ahora siento una dulce agonía en el interior, no puedo explicarlo, pero es la agonía de haberte pedido... Cada vez que pronuncio tu nombre, que veo nuestras fotos o recuerdo algo de ti, me hace pensar en lo feliz que me hiciste, en el papá protector que fuiste conmigo, en el hermano, amigo, consejero y mucho mas, quizás lleve años tapando esta herida sin que sane, pero separarme de ti, que la muerte te arrebatara de mi lado, fue una de las cosas mas drásticas que he vivido...

Pero seguimos luchando, seguimos en pie, seguimos sobreviviendo, porque aun nos quedan cosas por aprender, trayectos que seguir cruzando, caminos por terminar, y en algún momento cuando todo se detenga, sentirás como tu corazón late y late, hasta que se detenga por completo, hasta que no quede ningún sonido sobre la tierra, o sobre aquellas cosas que se atravesaban sobre ti, y sera en ese segundo cuando no sientas nada mas... Es el momento de partir.

Hay veces que no somos nosotros quienes decidimos cuanto tiempo quedarnos, siempre supe que viene, que baje para hacer felices a otros, me ha costado mucho sentir felicidad en este mundo tan distinto al mio, hay veces que siento que ya no quiero estar aquí  y es que mi realidad me sigue llamando, me sigue persiguiendo para que vuelva y me interne en aquel mundo donde el silencio me habla, donde las sombras logran ocultar el dolor, donde las melodías suelen calmar el dolor, donde las lagrimas se cristalizan al segundo de caer, donde todo es enfocado en un sitio distinto, donde en algún momento cielo y mar se funden en un solo punto...

He sentido la compañía de la soledad y el refugio de la propia oscuridad, he acariciado aquellas llamas fogosas para sentir un poco de calor entre tantos pilares de hielo que siguen cubriendo esas murallas que separan mi mundo, del mundo en el que el resto de las personas suelen vivir... Hay veces que solo consigo sentir aquel vació interior, y con eso solo sentir que aun sigo con vida, porque aun sigo respirando, sintiendo dolor y sigo sintiendo todo lo que soy...

¿Existe algún punto donde todo esto se detenga?, aun no lo se... Solo se que siguen habiendo caminos y sigo dejando huellas en la arena, huellas y pisadas, para no volver a pasar por ahí de nuevo... Los viejos pasos son aquellos donde nunca debes volver a pisar, para poder avanzar y llegar siempre a un sitio mejor.

Deleyda de Lioncourt.